Tarímbaro Michoacán a 20 de agosto de 2024.- Los habitantes de los fraccionamientos Rinconada de los Sauces, Laureles Campestre, Valle Real, y Terranova Uno y Dos en Tarímbaro han alzado la voz en contra del encargado del transporte público, Marco Antonio Zavala, debido a la creciente falta de camiones conurbados en sus zonas. La situación, que afecta a cientos de trabajadores y estudiantes, ha generado un clima de desesperación y frustración entre los vecinos.
Desde tempranas horas de la mañana, los habitantes se ven obligados a esperar hasta una hora para poder abordar un autobús de la ruta “conurbados” que los lleve a sus trabajos. A pesar de levantarse antes del amanecer con la esperanza de llegar puntuales, muchos reportan retrasos considerables debido a la escasez de unidades en circulación. “Es lamentable que no sean conscientes de la falta de transporte. Incluso ha habido peleas porque no dejan entrar más rutas. Si no pueden dar el servicio, que dejen entrar a más transporte”, denunció un residente, visiblemente molesto.
El problema no solo afecta a los adultos que deben cumplir con sus responsabilidades laborales, sino que también anticipa un caos mayor con el próximo inicio del ciclo escolar, cuando miles de niños y adolescentes comenzarán a asistir a las primarias y secundarias de la zona. “No quiero imaginar el problema que se va a suscitar cuando los niños entren a la escuela”, comentó una madre de familia preocupada.
Los habitantes han solicitado reiteradamente a Marco Antonio Zavala que tome cartas en el asunto, pero hasta el momento sus peticiones no han sido atendidas. El descontento es palpable entre los vecinos y exigen una solución inmediata para solucionar este problema
La situación ha llegado a un punto crítico, y los habitantes de los fraccionamiento de Tarímbaro están exigiendo que las autoridades locales y los encargados del transporte tomen medidas urgentes antes de que la situación se agrave aún más. “Esto es un caos”, concluyó otro vecino, quien lamentó que una necesidad tan básica como el transporte público sea ignorada por las autoridades.
Este llamado de atención a las autoridades destaca la creciente frustración de una comunidad que siente que sus necesidades no están siendo escuchadas, y deja claro que la paciencia de los habitantes de Tarímbaro está llegando a su límite.